Yogur natural cremoso

El yogur es un alimento muy socorrido en la dieta occidental, su riqueza en probióticos lo hace un alimento ideal para nuestro cuerpo. Desafortunadamente a nivel industrial lo han manipulado tanto que lo que nos venden como yogur en el super, dista mucho de ser el auténtico yogur. Si lees las etiquetas resulta que trae aditivos, espesantes, azúcar, saborizantes artificiales, un mínimo de pulpa de fruta (en caso de traerlo) que no rebasa el 8%, colorantes y no se que más.

Cuando yo era niña mi mamá nos preparaba el yogur en una yogurtera y nos lo daba con mermelada de higo que hacía en casa una vez al año con la cosecha de la higuera que teníamos. Nuestra higuera daba unas cantidades enooormes de higos dulces y pequeños, también teníamos un durazno, un chabacano, y granadas.

Ella a veces lo hacía sin yogurtera y se valía de una caja de cartón, cobijas y el calor del sol, le ponía nueces, o pasas, mermelada, fruta picada o azúcar. No se dónde compro su yogurtera, pero su mamá tenía una igual que ahora tengo yo. Es un aparato cuya única gracia es que al conectarse mantiene una temperatura muy baja de forma estable, la temperatura que mantiene es de 45-50°c aprox. además trae unos vasitos de plástico individuales para el yogur, peeero yo uso unos vasitos de vidrio de alimento para bebe que recicle por que traen tapita, las que pinté con esmalte de uñas, para que se vean monas.

La manera de hacerlo no puede ser más sencilla, y sólo necesitas 3 ingredientes para tener un auténtico yogur natural muy cremoso y lleno de nutrientes. Si no tienes yogurtera no te preocupes, yo, pensando en eso ya probé otro método, el resultado no es el mismo que con la yogurtera, pues es más difícil mantener una temperatura constante, por lo que vas a tener algunas variaciones en el resultado. Se trata de usar una hielera pequeña, ya sea de unicel o normal, y meter el preparado ahí, envuelto con trapos de cocina para conservar el calor; puedes ponerlo en la zona más tibia de tu casa, no al sol directo, pero si en un área que dispongas de la tibieza de los rayos solares, y debes dejarlo durante unas 6-8 horas.  Con la repetición te vas a dar cuenta de la consistencia que mas te guste y te irás haciendo de algunas mañas. Por ejemplo una de mis tías lo deja sobre la estufa después de cocinar, que queda tibia por mucho rato.

Si quieres adquirir una yogurtera yo he visto la misma que yo tengo de mi abuelita en Sears (no, no me pagan por esto, ni estoy haciendo publicidad) y cuesta algo así como $200.00, lo que es una inversión mínima para el juego que te da, pues yo por ejemplo la uso una o dos veces a la semana.

Quizá si lo dejas natural tal cual, te va a parecer un poco ácido en comparación con los yogures comerciales, pero es que, así es el auténtico yogur, de cualquier manera, puedes endulzarlo con lo que quieras o incluso añadir (como lo hago yo para mis hijos) un poco de leche condensada, en el momento en que haces tu preparado y antes de ponerlo a reposar; es más o menos un tercio de lata que vienen siendo como 130 grs. por litro de leche, con eso no queda dulce, pero se le quita casi por completo la acidez, si quieres más dulzor puedes jugar variando la cantidad de leche condensada a tu gusto. Te recomiendo la leche condensada por que ya he probado con azúcar, ya sea normal o mascabado, pero no se desintegra del todo y sientes los granitos al comerlo. También intenté endulzarlo con miel, peeeero ¡no sale!, supongo que hay alguna reacción que pasa entre la miel y el yogur, pues aunque queda rico no cuaja, ni queda cremoso, sino más bien líquido, casi como leche.

Puedes añadir a los vasitos de la yogurtera o a tu recipiente de un litro un poco de mermelada al fondo, y así lo haces del sabor que desees, fresa, mora, higo, lo que quieras, yo a veces le pongo chocolate líquido y trocitos de snickers y lo ofrezco como postre.

Otro consejo es que varíes los tiempos de reposo desde 4 hasta 8 horas, quedándote con el que obtengas la consistencia que más te gusta, a mi me gustan de 6 a 7 horas en la yogurtera porque queda cremoso, cuando me he pasado se vuelve más líquido.

Otra buena noticia es que para las personas intolerantes a la lactosa si lo consumes así de forma casera ¡no tiene lactosa!, porque los lactobacilos que tiene el yogur se encargan de degradar la lactosa de la leche hasta convertirla en ácido láctico, que es el responsable de darle esa acidez de la que les hablaba y la consistencia cremosa del yogur; y yo lo avalo, pues el yogur casero nunca me da molestias, como la leche entera. Si son intolerantes no deben añadir la cucharada de leche en polvo.

Bueno, si me han leído hasta aquí, se merecen un aplauso, porque esta vez si me extendí un poco en la explicación, pero es necesaria para que su yogur les quede perfecto.

Vamos ya con la receta:

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Ingredientes

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1 litro de leche (yo orgánica)

1 yogur natural (de buena calidad, pues de esto depende la calidad del yogur que obtengan)

2 cucharadas de leche en polvo (da cremosidad)

*opcional: 1/3 de lata de leche condensada (130 grs)

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Procedimiento

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Pon el litro de leche a calentar a fuego medio, solo hasta entibiarse, si tienes un termómetro de cocina, solo hasta 50ºc, sino lo tienes, no importa, calienta y cuando puedas meter el dedo (limpio) y dejarlo ahí 10 segundos sin que queme, será la temperatura ideal. No debes pasarte con la temperatura, pues para que las bacterias del yogur se reproduzcan necesitan esa tibieza, si te pasas se mueren, y adiós yogur.

Cuando hayas alcanzado dicha temperatura, apaga la flama y añade el yogur, la leche en polvo y la leche condensada en caso de ponerla. integra muy bien con un batidor de globo.

Si no quieres poner la leche en polvo, ni la condensada, no importa, puedes hacerlo solo con leche y el yogur natural.

Llena los vasitos o el recipiente del yogur si vas a usar un recipiente de 1 litro. En este punto a algunos vasitos les puse una cucharada de mermelada de frambuesas que yo había preparado, pues quería unos naturales y unos de frambuesa; esa es otra ventaja de hacer vasitos, puedes variar los sabores.

Puedes poner chocolate líquido, mermelada, ralladura de limón o naranja, pasitas de uva, puré de manzana o ciruela, ¡lo que quieras!.

OJO: no pongas miel porque no cuaja, no pongas fruta natural pues se corta y tampoco se hace, si elijes fruta debe estar o en confitura, o cocida tipo puré.

Mete los vasitos en la yogurtera o en la hielera que usaras (sin taparlos).

Conecta la yogurtera o en su defecto tapa tu caja de cartón y envuélvela hasta con una manta pequeña, el objetivo es conservar el calor;  deja reposar entre 6 y 7 horas.

Después de el tiempo transcurrido tu yogur está listo, pero no lo puedes comer porque estará tibio, tapa los vasitos y mételos al refri, si, debes meterlo tibio (yo tampoco meto nada tibio al refri, por aquello del ahorro de energía, pero con el yogur hay que hacerlo) por espacio de unas cuatro horas o más para que se enfríe y termine de solidificar.

Puedes comerlo así, añadirle fruta picada o mermelada, tu límite es la imaginación.

¡Perfecto para un desayuno equilibrado!

Si no pusiste mermelada al fondo y los dejaste completamente naturales, también es posible que decidas el sabor a la hora de comerlos y le pones una cucharada de mermelada o de miel, por ejemplo yo quería uno de moras:

Ya no hay pretextos para seguir comprando yogur, inténtalo tú!

Guarda un vasito para volver a hacer más…si es que no se los terminan, como pasa en mi casa