Receta de Crystal Sánchez basada en bizcocho de yogur, 1, 2, 3
Hay muchas recetas de pastel de zanahoria, yo personalmente he probado como 4 o 5 distintas, algunas con un buen resultado, otras no tanto. La esencia es la misma: zanahoria, harina y canela, lo que cambia obviamente son las proporciones y los complementos: algunas llevan frutos secos, otras no, algunas mantequilla otras aceite (en este punto, ya hice varias pruebas y por alguna razón la textura con la mantequilla es pesada, apelmazada, aunque el sabor es rico y usando aceite es muy ligera y suave, en definitivo para el pastel de zanahoria me quedo con el aceite) algunas mezclas incorporan leche y otras jugo de naranja; otras más ralladura de cítricos, en fin que por recetas no paramos.
Hace poco desayunamos en un lugar que me encanta, y al pedir un panqué de zanahoria me llevaron un panquesito (muy rico, si) que era su clásico panqué de mantequilla con poquísima zanahoria rayada que apenas se distinguía; como diría mi abuelita: «no’más engañadito» y para mi, eso si no es un pastel de zanahoria.
Así que me tuve que poner manos a la obra e idear la receta en mi mente, lo preparé de volada, porque estaba en la oficina y apenas me dio tiempo de hacerlo al llegar a casa. Como no tenía tiempo para medir y pesar (usando la receta que habitualmente hago) me aventuré a remasterizar la receta clásica en España del «bizcocho de yogur» y digo en España, porque aquí en México no es una receta conocida y como en mi andar «blogueril» he leído esta receta infinidad de veces, me decidí a ocupar como referencia las medidas del yogur, pero cambiando un poco las proporciones, el resultado: un acierto total.
Les cuento un poco la esencia de este bizcocho: según algunas fuentes se dice que este bizcocho fue parte de una campaña de una conocida marca de yogurs que también se vende en México y llegó para quedarse en los hogares españoles; por lo que sé es el bizcocho clásico que se hace en toda casa española desde siempre (eso es lo que he leído en muchos muchos blogs, si me equivoco corríjanme) y la particularidad es que todo lo mides con un vasito de yogur (vacío por supuesto) y que sin complicaciones tienes un bizcocho rico. Las proporciones originales son las siguientes: 1 vasito de yogur natural, 1 vasito de aceite, 2 vasitos de azúcar, 3 vasitos de harina, 3 huevos y una cucharadita de polvo de hornear, de ahí el nombre: 1,2,3.
Ya otras veces he preparado el bizcocho de yogur tal cual son las proporciones, pero no he quedado convencida, con esas proporciones a mi me queda un pelín apelmazado, excesivamente dulce, vamos que no es mi receta. No sé por que, pero lo he intentado infinidad de ocasiones y siempre obtengo el mismo resultado, sin embargo he hecho algunos cambios y el resultado mejora, tal fue el caso de esta receta. La improvisé el viernes pasado y a todos les gustó, quedó tan rico que en una semana lo he preparado 3 veces más: una para mis padres, una para una de mis amigas y otra más para tenerlo de reserva. Todas las veces obtuve un muy buen resultado, es un bizcocho suave, especiado, y si, adictivo. Si lo haces debes tener con quien compartirlo, porque si no, corres el riesgo de comerlo entero…créeme te lo digo por experiencia.
¿Que de cual yogur? pues de la marca que sea tu preferida, que sea natural o también iría bien de limón, el vasito es de 125 ml usualmente, yo lo hice usando el yogur natural cremoso que preparo en casa.
¡Vamos a la receta!
Ingredientes
(Se miden con el vasito de yogur natural)
3 vasitos de harina
1.5 vasitos de azúcar mascabado (si no tienes usa azúcar común, en ese caso yo solo pondría un vasito, porque es más dulce, pero lo dejo a tu elección)
1 vasito de yogur natural (125 ml)
1 vasito de nuez molida (100 gr)
2.5 vasitos de zanahoria rayada fino (2 medianas, aprox. 250 gr)
1 vasito de aceite de maíz*
*puedes usar de girasol o de soya, debe ser un aceite neutro que no cambie el sabor de los alimentos
3 huevos m
1.5 cucharaditas de canela en polvo
1.5 cucharaditas de polvo de hornear
La ralladura de 1 naranja
Precalienta el horno a 180ºC.
Bate a velocidad alta el azúcar con el aceite y los huevos por unos 5 minutos (no, no es mucho tiempo, el resultado merece la pena).
Cuando tengas una mezcla muy espumosa es hora de añadir la canela, el yogur y la nuez molida, sigue batiendo ya solo para integrar todo.
Ahora añade la zanahoria rallada, la ralladura de naranja e integra bien.
Por último cierne sobre esta masa las tres medidas de harina con el polvo de hornear.
SIN BATIR, integra todo con ayuda de las varillas de la batidora, solamente hasta que se vea terso, si ves algún «grumo» bate a velocidad baja unos 30 segundos, solo para homogeneizar la masa.
Te va a quedar como esta:
Vierte la mezcla en un molde engrasado y enharinado.
Hornea, yo lo tuve en el horno 50 minutos, recuerda que el tiempo es orientativo, pues depende del tamaño de tu molde, del material del mismo y claro, de tu horno; está pendiente desde los 40 minutos.
Cuando creas que está listo haz la prueba del palillo, si sale limpio ya está.
Saca del horno y cubre con un trapo de cocina por unos 10 minutos, esto es para evitar que se seque, y para desmoldar más facilmente.
Pasado el tiempo desmolda.
Yo lo dejé tal cual sin decorar ni nada. Es muy rico y sencillo, la nuez lo hace tierno, esponjoso, y le da un sabor muy delicado, prepáralo y me cuentas.
Este es el que hice para mis padres:
Y este para regalar a una de mis amigas, lo hice en un molde de panqué, pero son las mismas proporciones.
Disfruta tu fin de semana!
CRYS
Felicitaciones por la receta; me gustó mucho la inspiración española en las medidas :). Es cierto lo que comentas, el bizcocho de yogur utilizando el vasito como medida es un gran clásico acá. Hasta los estudiantes que salen de su casa y no tienen ni idea de cocina se animan con él :)).
Probaré tus indicaciones y ya te digo. Yo hice el pastel de zanahoria según receta irlandesa sólo una vez, y fue un éxito total. Un consejo que seguí de aquella receta que me vino muy bien fue estrujar bien la zanahoria una vez rallada para eliminar el exceso de agua, ya que la zanahoria suelta mucho líquido.
Y una particularidad de la receta irlandesa es el frosting de queso, que en mi opinión le aporta un extra para los más golosos, pero la verdad es que hace la receta bastante más laboriosa.
Lo dicho, felicidades y espero ya la siguiente receta.
Un abrazo!
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Muchas gracias por comentar, no sabes la ilusión que me hace leer a quien está del otro lado, espero que te guste el resultado de la receta. Probaré ese consejo de estrujar la zanahoria. Te mando un abrazo cariñoso!
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Qué riquiña 🙂
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Crys necesito ayuda! Jaja hoy hice pastel de zanahoria pero como dices quedo apelmazado, será q no lo bati bien? Aun no lo pruebo pero no esponjo mucho…intentaré luego está receta! Se ve fácil y eso de los vasitos facilita la vida cañón jaja besos
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No te preocupes, pueden ser varias cosas: quizá te faltó batir los huevos con el azúcar, eso da mucha esponjosidad, yo los bato de 3 a 5 minutos, o no pusiste la cantidad adecuada de polvo de hornear. Otro punto es que pudiste haber sobre batido la masa, es decir, los huevos con el azúcar se pueden batir mucho, hasta 10 minutos si tienes paciencia, y eso da esponjosidad, pero, una vez que pones la harina (casi siempre es lo último) debes dejar de batir y solo integrar con una palita de madera o con la batidora a velocidad muy baja, solo hasta que no haya grumos, porque la harina al sobrebatirse desarrolla el gluten y hace la mezcla chiclosa y apelmazada. También puede ser que lo hiciste en un molde muy pequeño para la masa que te salió. Particularmente el pastel de zanahoria es menos esponjoso que uno normal, no te asustes, la práctica hace al maestro. Un beso Eri!
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QUE DELICIOSA RECETA ME ENCANTO,MUY FACIL Y RAPIDA ME QUEDO ESQUISITO EL PAN QUE ISE GRACIAS POR ESAS RECETAS.LES ESCRIBO DESDE ZAMORA MICHOACAN
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Gracias a ti por venir a mi blog e intentar mis recetas, no sabes lo que me alegra saber que esta receta te ha gustado tanto como a mi. ¡Un abrazo hasta Zamora, Michoacán!
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