Receta de Crystal Sánchez
Una extraordinaria forma de cuidar nuestra alimentación, es a través de la elección de alimentos correctos, muchas veces hacemos nuestras comidas principales apegándonos a una dieta saludable; sin embargo donde nos «resbalamos» es en los bocadillos o meriendas, pues si salimos a la calle nos resulta mucho más fácil recurrir a algún producto chatarra que tengamos a la mano para calmar nuestra hambre.
Siempre que salgo hacia la oficina trato de llevar conmigo alguna merienda sana, saciante y rica, a veces una pieza de fruta y un puñado de nueces es suficiente, otras elijo un poco de humus con vegetales crudos rebanados, también me encanta llevar sándwich de mantequilla de cacahuate y fresas por ejemplo y cuando el tiempo aprieta pues con un vasito de yogur natural con granola es suficiente.
Pero, algunas veces, cuando no voy a la oficina, sino a la calle a resolver algunos asuntos o hacer compras, la cosa se me complica un poco, pues no es tan cómodo andar llevando un tupper con yogur o fruta picada y es entonces cuando tengo que ser creativa para no terminar comiendo cualquier cosa.
Así que quiero enseñarte a preparar unas bolitas energéticas, que son deliciosas, nutritivas y fáciles de llevar en el bolso, inclusive puedes ponerlas en la mochila de los niños como complemento para las horas en que les da hambre y ya comieron su lunch.
Ingredientes:
(18 a 20 bolitas)
1 taza de agua purificada
250 gr de dátiles deshuesados
1 cucharada de aceite de coco
1/2 de taza de coco rayado
1/3 de taza de amaranto inflado
1 cucharada de miel de abeja
1/3 de taza de nueces picadas finamente
Para decorar:
Coco rallado
Procedimiento:
Remoja unos 15 minutos los dátiles en agua purificada para que se suavicen.
Cuando ya se han remojado colócalos en un procesador de alimentos para molerlos, con dos cucharadas del agua de remojo.
Añade el aceite de coco, el amaranto, el coco rallado y la miel de abeja.
Procesa hasta que tengas una masa compacta y homogénea.
Vacía la masa a un plato.
Añade las nueces picadas.
Distribúyelas bien con ayuda de una cuchara
Con tus manos ligeramente húmedas haz bolitas de aproximadamente 2 cm de diámetro.
Coloca el coco rallado en un plato extendido y revuelca cada bolita en el coco rallado.
Si crees que están un poco flojas puedes refrigerarlas un hora para que se pongan duras.
Guarda en un recipiente hermético para cuando necesites tener un snack saludable.
¡Excelente jueves!
CRYS